¿Cuánto puedo cobrar por mi accidente?

cuanto puedo cobrar por accidente de trafico

Es una de las primeras preguntas que muchos clientes nos hacen cuando tras sufrir un accidente de tráfico en Tenerife contactan con nuestro despacho de abogados: “¿Cuánto puedo cobrar por mis lesiones?, ¿qué indemnización me corresponde?”

Antes que nada hemos de dejar una cosa clara: no se puede calcular la indemnización por un accidente de tráfico hasta que la persona no está dada de alta y sus lesiones estabilizadas. Quien diga lo contrario miente. Cosa distinta es que en base a nuestra experiencia como abogados de tráfico tengamos una idea aproximada de lo que se viene pagando por un latigazo o esguince cervical (en función del grado) o una rotura abierta de tibia y peroné, pero malos profesionales seríamos si nos pusiéramos a hacer de adivinos o -peor aún- generáramos en nuestro cliente falsas promesas o expectativas de indemnización meramente con el ánimo de que acabe contratando nuestros servicios.

Nuestra labor en Abogado Accidente Tenerife es la de reclamar la mayor indemnización posible para nuestros clientes y facilitar toda la información que sea menester para que éstos sepan cómo se va a calcular su indemnización. Podemos por ejemplo indicar que por cada día que no pueda desempeñar sus actividades habituales ese lesionado cobrará (en el 2013) 58,24 euros, y 31,34 euros por cada día que pese a requerir tratamiento médico no ha implicado imposibilidad para el desempeño de los quehaceres normales de esa persona. A partir de ahí, tratar de jugar a los adivinos para saber si a una víctima de un accidente le van o no a quedar secuelas, cuáles y de qué gravedad y si además las mismas serán contempladas o no por el médico forense va un mundo.

Sí es verdad que existen una serie de lesiones que suelen dejar algún tipo de secuelas. Por ejemplo las lesiones de índole cervical residúan durante meses con dolores de cabeza o en el cuello, hormigueos en las manos y rigidez. Otras que para su curación han requerido implantación de tornillos y placas suelen dejar -además de la cicatriz, que es una secuela estética- molestias a medio y largo plazo que a veces desembocan en la retirada del material de osteosíntesis.

Confieso que tras más de veinte años como abogados especializados en accidentes en Tenerife incluso antes de que el cliente se siente frente a nosotros ya tenemos una idea clara del tipo de lesiones que tiene, del tiempo que tardará en curarse y de las posibles secuelas que le vayan a quedar. Obviamente con esas premisas podemos hacernos una idea no muy desacertada del rango en que se moverá la indemnización que va a cobrar. Pero también esa experiencia acumulada hace que nos cuidemos muy mucho de verbalizar lo que nuestros cálculos apriorísticos aventuran, primero por lo anteriormente manifestado de no generar expectativas no basadas en hechos, y segundo porque en más ocasiones de las que pudiera creerse intervienen factores que hacen que esa indemnización aumente o mengüe de manera exponencial. A veces aparece una hernia con la que no se contaba y a la indemnización se le acaba adicionando 3000 euros más, a veces la persona pide el alta voluntaria porque en su puesto de trabajo la amenazan con el despido y se queda cobrando la mitad de lo que hubiera sido normal, etc, todo ello por no entrar en cuestiones técnicas como que exista una concurrencia de culpas en el accidente o a la cantidad a pagar haya que adicionar intereses de demora.

Por todo ello, pida a su abogado de tráfico que le explique qué parámetros se usan para calcular la indemnización, pero no le ponga en el brete de intentar adelantarse a su propia recuperación ni tampoco se deje llevar por los cantos de sirena de quien dice poder garantizarle lo que usted va a cobrar antes de saber cómo va a quedar su salud tras el siniestro.